¿A qué edad me conviene contratar un seguro médico?

27.01.2023

Contar con una buena salud es una de las bases para una vida plena. De ahí que muchas personas se planteen la contratación de un seguro médico privado con el que complementar la asistencia de la sanidad pública y garantizarse de esta manera el mejor cuidado de su salud. Es habitual que nos surja la duda sobre cuál es la edad más adecuada para dar el paso. 

¿VALE LA PENA CONTRATAR UN SEGURO DE SALUD PRIVADO SIENDO JOVEN?

A menudo cuando somos jóvenes nos sentimos llenos de salud y energía y pensamos que, salvo cuestiones puntuales, no nos hace falta una cobertura añadida. Sin embargo, la juventud no siempre es sinónimo de salud y nada nos garantiza que no podamos necesitar de asistencia médica, especialmente si surge un imprevisto relevante. Disponer de un seguro médico nos permite en esos casos un acceso rápido a consultas y pruebas diagnósticas dentro de una amplia gama de profesionales a nuestra libre elección, entre otras numerosas ventajas.

Otro factor importante a tener en cuenta son las preexistencias. Una patología preexistente es aquella dolencia o enfermedad que, diagnosticada o no por un especialista, ha padecido o sigue padeciendo una persona en el momento de la contratación del seguro de salud. Como consecuencia de una preexistencia, las compañías aseguradoras se reservan el derecho de excluir alguna cobertura del seguro o incluso de asegurar o no a la persona. Antes de contratar tu seguro, es habitual que debas contestar a un cuestionario de salud, a partir del cual se determinan las posibles preexistencias. Conviene ser lo más sinceros posible a la hora de responder puesto que mentir u ocultar dolencias puede llevar a la anulación del seguro.

A medida que envejecemos, aumentan las posibilidades de desarrollar enfermedades crónicas. De ahí que contratar un seguro siendo aún joven te evite preexistencias y te garantice que en el momento en que surja una dolencia esta sea ágil y eficientemente atendida.

Otro elemento a valorar son los periodos de carencia. Se llama así al plazo de tiempo que ha de transcurrir desde que se da de alta el seguro hasta que se pueden utilizar determinadas coberturas de la póliza. Servicios como la atención al parto, por ejemplo, suelen tener un periodo de carencia. El objetivo no es otro que evitar fraudes y que las personas contraten pólizas solo para realizarse algún tratamiento o prueba específica, ya que sale más económico pagar la póliza que la propia prueba. Como recomendación, antes de contratar una póliza infórmate de qué pruebas y servicios tienen periodo de carencia y de cuánto tiempo es en cada caso. En este sentido, cuanto antes contrates tu seguro, antes superarás los periodos de carencia y disfrutarás de todas las ventajas de tu seguro.

Por otro lado, la asistencia sanitaria que nos ofrece un seguro va más allá del tratamiento de la enfermedad. La medicina es cada vez más preventiva y contar con un seguro médico nos facilita, por ejemplo, poder realizar revisiones anuales y sus pruebas de forma rápida y con el o la profesional médico que sea de nuestra confianza.


Actualmente es por todos conocidos los problemas que presenta la atención primaria y las largas listas de esperas en nuestro sistema sanitario. Por ello es claramente recomendable disponer de un seguro de salud, ya que los problemas de salud no avisan y pueden presentarse en cualquier momento afectando a jóvenes y no tan jóvenes. Para más información contacta con Seguros Algemesí en los teléfonos 960489818/657903422 o a través del correo electrónico info@segurosalgemesi.es

Puedes rellenar el siguiente formulario y nos pondremos en contacto contigo a la mayor brevedad posible.